Un azulejo es una obra de arte. Su consideración ha dependido a lo largo de la historia de las modas y de los usos, además de la economía. El factor utilitario ha jugado en detrimento de su valor. Actualmente parece que hay un movimiento a favor de su consideración. Al margen de otras apreciaciones, la unión de la tierra y su proceso de conformación y el barniz y su difícil formulación da como resultado piezas únicas tanto en la antigüedad como en las últimas producciones seriadas. La restauración de estas piezas mediante el respeto absoluto a las fórmulas cerámicas, y a su dura fragilidad nos enseña a apreciar lo que a simple vista no podemos ver. En la foto, un azulejo de floreta, s. XIX , recuperado de un contenedor que iban a vaciar en un vertedero.En cuanto esté limpio y restaurado colgaremos su foto.
viernes, 20 de enero de 2012
RESTAURACIÓN DE AZULEJOS
Un azulejo es una obra de arte. Su consideración ha dependido a lo largo de la historia de las modas y de los usos, además de la economía. El factor utilitario ha jugado en detrimento de su valor. Actualmente parece que hay un movimiento a favor de su consideración. Al margen de otras apreciaciones, la unión de la tierra y su proceso de conformación y el barniz y su difícil formulación da como resultado piezas únicas tanto en la antigüedad como en las últimas producciones seriadas. La restauración de estas piezas mediante el respeto absoluto a las fórmulas cerámicas, y a su dura fragilidad nos enseña a apreciar lo que a simple vista no podemos ver. En la foto, un azulejo de floreta, s. XIX , recuperado de un contenedor que iban a vaciar en un vertedero.En cuanto esté limpio y restaurado colgaremos su foto.
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